Quiero tu tiempo, tu niñez, tus recuerdos,
los juegos de tu infancia, tus muñecas,
lo que vieron tus ojos, tus dolores,
tus cajas de pinturas, tus rayuelas.
Quiero ese tiempo en que no te conocía,
Lo quiero todo con su sonido y con su canto,
para guardarlo junto en las maletas,
que usaremos para andar nuestro camino.